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«Shani» de globos en Tanzania

Publicado en Ultramagic por el mundo

"Shani" de globos en Tanzania.

Desde Ultramagic hemos organizado un “Shani” en Tanzania para celebrar los 25 años de nuestro viaje por África, en el que seguimos los pasos de Julio Verne en “5 semanas en globo”.
“Shani” es una palabra Swahili que significa aventura, evento especial, etc y esto es lo que fueron exactamente los 11 días de nuestra estancia allí.
Pilotos y equipos de distintos países del mundo: Japón, Estados Unidos, Reino Unido, Alemania, Italia, Francia y España, junto con muchos amigos, nos reunimos para esta especial ocasión y disfrutar de distintos vuelos.

      Llegamos a Dar es Salaam el 18 de Marzo, y fuimos directamente a Zanzíbar en un barco rápido alquilado para la ocasión que después utilizaríamos como soporte y rescate para un vuelo muy especial.

Pudimos descansar un poco y visitar esta maravillosa isla. Por la tarde del día 18 llegaron los globos y lo dejamos todo a punto para el vuelo de la mañana siguiente.

La mañana del día 20, a las 6h00 los 15 globos despegaron. Fue muy emocionante ya que se había estado planeando durante mucho tiempo. Este vuelo era para familiarizarse con el butano y la zona, ya que allí hace mucho más calor que donde volamos normalmente. Un vuelo de 30 minutos fue suficiente para sobrevolar Stone Town, poder admirar la costa y tener algunos problemas con el rescate ya que los globos iban dirección al mar!! Todo el mundo ayudó en el rescate. Algunos globos se tuvieron que transportar a mano más de un kilómetro porque no había carretera para llegar donde habían aterrizado.    
Para el día siguiente estaba previsto el vuelo de travesía entre Zanzíbar y el continente. 8 globos estaban preparados para el despegue, con las botellas llenas. Desafortunadamente el tiempo no era el más adecuado. Con tormenta en la costa del continente, un viento inferior al esperado y dirección sudeste (yendo a NO), decidimos que solo salieran 3 globos. Así asegurábamos un rescate sin problemas con los dos barcos que teníamos preparados si los globos aterrizaban en el agua.
 
Así pues el 21 de Marzo un T-150 pilotado por Carles Lladó y Angel Aguirre, y el cámara David Fernández, un M-105 pilotado por David Bareford y Uwe Schneider, y un S-90 pilotado por Juan Cobos y Domènec Sayós despegaron a las 14:00. En el campo de salida contamos también con la presencia de un grupo de música local que compusieron una canción para la ocasión. La travesía duró aproximadamente unas 4 horas. Al principio hubo nervios, los que íbamos en el barco no lo veíamos muy claro, afortunadamente al final resultó un gran éxito. Pudieron disfrutar de unas vistas maravillosas, como se ve en las fotos de hicieron, y aterrizaron sanos y salvos al otro lado.    
El rescate duró 24 horas. Salieron de Bagamoyo aquella misma noche y no volvieron hasta la noche del día siguiente. Estaban todos muy cansados pero felices de haber conseguido realizar la travesía igual que Jaume, Joan y Josep Mª 25 años antes. El resto tuvimos tiempo de descansar, salir a navegar en los “Dhows” o visitar el antiguo pueblo de Bagamoyo.
 
El día siguiente, después de la carga de gas, salimos hacia la Reserva de Caza de La Selous. En el anterior viaje de 25 años atrás, este fue también un lugar especial. En aquella ocasión tuvimos que estar allí más de un mes esperando a que los vientos cambiaran de NO a SE, con lo que conocimos muy bien la zona y realmente vemos que no ha cambiado mucho.

Para asegurar que llegábamos a La Selous más o menos a tiempo, alquilamos un tren con la máquina y dos vagones de carga para los globos, el gas y los equipajes. El viaje fue muy interesante, y desde el tren pudimos ver ya algunos animales. Paramos en un pueblo para dejar pasar a un tren que iba en la otra dirección. La gente del pueblo se sorprendió al vernos igual que nosotros al verles a ellos!
 

El alojamiento en La Selous no fue fácil, no están preparados para grupos tan grandes, de todas formas hicieron todo lo que estuvo en sus manos para acomodarnos. Mientras nos dirigíamos al Lodge pudimos darnos cuenta de que los vuelos no iban a ser fáciles. La estación de lluvias esta empezando y los caminos podían quedan impracticables.
 
   
Dejamos los globos preparados justo al lado de la vía del tren. El vuelo de la mañana fue sobre la sabana, lo disfrutamos muchísimo tanto pilotos como equipos. Estábamos en una de las áreas más inhóspitas de la tierra y podíamos notar la cercanía y poder de la naturaza.

Los rescates no fueron fáciles, pero conseguimos dejar todos los globos preparados para el vuelo del día siguiente, que sería cerca de los lagos y del río. El paisaje era especial y aquí volamos juntos Joan, Jaume y Josep Mª en recuerdo del los vuelos que hicimos allí mismo hacía mucho tiempo pero que todavía recordamos muy bien.

Fue un vuelo corto, ya que si cruzábamos los lagos, el rescate podía durar días. Corto pero intenso y pudimos admirar el inmenso paisaje africano. Después del vuelo, de safari y para comer un picnic bajo un gran baobab.
 
Volvimos a preparar los globos en otra zona para el vuelo de la mañana. Estaba planeado hacer un vuelo de noche ya que había luna llena. Una tormenta por la noche nos hizo cambiar los planes, pero a cambio pudimos ver un espectáculo de luz para nosotros solos.

Nos levantamos a las 6 para ver si podíamos hacer otro vuelo. El cielo estaba cubierto pero se pudo hacer, con algunas dudas al principio, al final la dirección del viento fue muy buena y el rescate de los globos fue muy fácil.

Los cientos de animales que vimos durante los vuelos, incluyendo elefantes, búfalos, jirafas, hipopótamos, ñus, hizo que aun disfrutáramos más de nuestra estancia y nos diéramos cuenta de lo afortunados que éramos por haber volado allí.
 

Al día siguiente regresamos a Dar es Salaam en tren. A la 1 de tarde, con una inusual puntualidad, vimos aproximarse el tren. Lo cargamos todo de nuevo y por la noche ya estábamos en Dar.

El último día fue para descansar, comprar souvenirs o hacer un poco de snorkeling. Por la noche cena de despedida en la playa, y a la mañana siguiente regreso a casa.
 

La organización no fue nada fácil, pero pudimos hacer 5 vuelos en 11 días, todos los que estaban previsto, por lo que lo consideramos todo un éxito.
El país no está exento de dificultades, pero tuvimos mucha ayuda de gente de Aviación Civil, Ministerio de Turismo, Parques Nacionales de Tanzania, Reserva de Caza de La Selous.
Sobretodo de Jimmy Mkwawas, nuestro mayor soporte en Tanzania, sin el cual hubiera sido extremadamente difícil organizarlo.
   
Todos los equipos y amigos fueron excelentes compañeros de viaje, ya que no complicaron más lo que de entrada no era fácil.

Se está preparando una película que junto con las miles de fotos que tomamos nos servirán para recordar este viaje para siempre.

Este viaje nos recuerda que Ultramagic probablemente hoy no existiría si no hubiéramos hecho el nuestro hace 25 años.